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AMBA - Contaminación visual

651K views 3K replies 256 participants last post by  EzeBA 
#1 ·
CONTAMINACION VISUAL

La Ciudad, zona liberada para carteles publicitarios


El problema afecta al espacio público. Y avanza a una velocidad nunca vista.


Carlos Gallardo *


Los eternos y recurrentes debates sobre la chatarra visual (carteles) que invade la avenida Lugones nos obligan a preguntarnos qué pasa con el resto de la ciudad que, día a día, va desapareciendo ante nuestros ojos. Vemos los muros laterales de los edificios con enormes pintadas que convierten a sus propietarios en cómplices de la destrucción de su propio patrimonio.

Terrazas y casas literalmente aplastadas por gigantescas estructuras que contaminan sin límite de altura ni tamaño, en todos los barrios de la ciudad. Instituciones gubernamentales como ATC y el Palais de Glace, o concesionadas como el Hipódromo, Zoológico, Campo de Polo, Club de Amigos, Gimnasia y Esgrima y una lista interminable que todos podemos verificar, disponen de sus espacios verdes o de sus entornos con impunidad.

Paradas de colectivos diseñadas con el exclusivo objetivo de contener publicidad, y no para su función específica, cabinas telefónicas, terrenos laterales del tren, cercos de obras en construcción, frentes de estacionamientos, carteles en V de las inmobiliarias, son algunos de los elementos a los que se echa mano para publicitar con una virulencia y velocidad nunca vista antes. Las marquesinas, otra variante de cartel, son también un grave problema porque nos obligan a caminar bajo techos, que muchas veces llegan hasta los cordones de las veredas, sin límite de altura o tamaño y de lamentable calidad constructiva. A marquesina puesta, árbol desaparecido.

Como novedad está el sistema perverso que organiza pegatinas en postes de luz, semáforos o cualquier superficie libre de la ciudad y que ni siquiera paga impuestos. ¿Por qué se permite? ¿Quiénes son los responsables? ¿Por qué no se controla?

Estamos profundamente preocupados por el nivel de agresividad que alcanza este flagelo; leemos con envidia y algo de tristeza la ley que se acaba de dictar en el Ayuntamiento del Madrid que obliga a quitar 120.000 de los 200.000 carteles luminosos que tiene la ciudad. Comparando, nos preguntamos el porqué de la gran contradicción que encierra el hecho de que, aunque entendemos que el problema nos excede y nos antecede, el Gobierno se entregue tan pasivamente a esta acción profundamente mercantilista y, en algunos casos, (como ATC y Palais de Glace) sea el responsable directo de la contaminación. ¿Será esta la Buenos Aires del Bicentenario?

* Diseñador de Comunicación Visual, artista plástico y escenógrafo

Clarin.com
 
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#2 ·
Al igual que los carteles, voy a expresar visualmente mi opinion, sobre una de las más conocidas avenidas porteñas.

:puke:


Miren que lindo todos los edificios con sombrerito


¿Alguien conoce una manera más facil y rápida de arruinar un edificio? si es así, favor de comunicarse con las agencias de publicidad que pondrán tu idea en práctica


Si, ya no sabemos que más hacer para que nos den bola
 
#3 ·
BUENOS AIRES - Las Cañitas, tapado de carteles ilegales


LOS INSTALAN SOBRE TECHOS Y TERRAZAS DE CASAS Y LOCALES DEL CIRCUITO GASTRONÓMICO DE PALERMO


Las Cañitas,
inundada por enormes
carteles de publicidad
prohibidos






No están permitidos porque es zona residencial. Los vecinos dicen que el problema se suma al ruido, el caos de estacionamiento y para andar por las veredas. En la Comuna mandaron intimaciones para que los saquen.



Ofrecen bebidas, autos, servicios telefónicos y hasta destinos turísticos. Enormes carteles, sobre los techos y terrazas de casas y restaurantes, comenzaron a invadir el paisaje de Las Cañitas, en el barrio de Palermo. Al menos diez estructuras, según contabilizó Clarín, fueron instaladas en el corazón de ese circuito gastronómico y compiten con los locales por la atención de la gente.

El problema es que este tipo de cartelería "espectacular" -como la llaman en el ambiente publicitario- está prohibida en la zona, categorizada como "residencial 2" por el Código de Planeamiento Urbano, según informaron en el Gobierno porteño. Solo en la cuadra de Báez al 200 ya hay seis carteles sobre terrazas y techos. Algunas ocupan los ocho metros de frente de los locales. Otros, verticales, desvían la mirada en las esquinas de Arevalo y Huergo y en Arévalo y Arce montados sobre estructuras metálicas.

La silenciosa aparición de los carteles molestó a los vecinos cuando descubrieron, el 25 de enero, que un añoso árbol había sido talado en la esquina de Báez y Arguibel porque dificultaría la visibilidad de un enorme cartel que estaban montando en la terraza de un departamento. "Lo talaron de noche, como a escondidas", contó la vecina Isabel Loayza, defensora de la tradicional fisonomía del barrio que comenzó a cambiar por la movida de los restaurantes primero, y por el boom inmobiliario. "Me preocupa qué podría pasar con esos carteles si viene un viento fuerte o un temporal", señaló Loayza. "Aunque tenemos problemas más urgentes, acá la contaminación visual ya es preocupante", cerró.

Si bien este tipo de publicidad existe en otros barrios, en Cañitas hay una enorme concentración en pocas cuadras. "Lo de los carteles es la gota que colmó el vaso, se suma al ruido nocturno, los problemas con el estacionamiento y hasta lo difícil que es andar por las veredas, llenas de mesas para comer", contó Natalia Medina, una vecina de la calle Arévalo a quien le cuesta moverse con el carrito de su hijo.

Santiago Salvá, director de Ordenamiento del Espacio Público del Gobierno de la Ciudad explicó a Clarín que, en ese sector, "no está permitida la instalación de estructuras sobre las terrazas". Y que la Comuna ya envió 55 intimaciones a propietarios de casas, anunciantes y empresas de publicidad por los carteles irregulares en Las Cañitas. "Hay mucha cartelería en zonas prohibidas pero como una importante cantidad está en propiedades privadas con vista a la vía pública, no podemos retirarla sin una orden de allanamiento", justificó el funcionario. Ahora -explicó- les exigen a empresas y particulares que presenten la documentación con las habilitaciones para instalar cartelería o, de lo contrario, que saquen las estructuras.

Las Cañitas es uno de los lugares donde mejor cotiza la publicidad callejera. Mariano Tejero, director de Alberto Scopesi & Cía, una empresa especializada en auditoría de publicidad en la vía pública, comentó que las mediciones en la zona muestran que "el 'rating' de circulación no es masivo, pero a ciertos productos les sirve porque les permite alcanzar un target muy segmentado". Y según datos de esa empresa, en 2007 la publicidad en la vía pública en Capital y GBA generó más de $ 800 millones.

En los terraplenes del ferrocarril Mitre, sobre la avenida Dorrego al 3200, en la desembocadura de Báez, también fueron apareciendo cada vez más carteles y en estos días siguen colocando nuevas estructuras de metal. Ya formaron una cortina que impide ver pasar el tren desde esa avenida, un clásico paseo. Desde el Gobierno porteño dijeron que no hay regulación en materia publicitaria para los terrenos del tren. Así, el vacío legal no impediría la persistente degradación del espacio público.



Cifra I

$ 3.000 Lo que llegan a cobrar los dueños de casa por mes por un cartel. Los contratos arrancan en $ 1.000, y son por un mínimo de seis meses.



Cifra II

$10.000 Lo que llegan a pagar las empresas que publicitan sus productos en Las Cañitas. Sobre la Lugones, trepan a $ 30.000.



http://www.clarin.com/diario/2008/02/05/laciudad/h-03301.htm
 
#4 · (Edited)

En Palermo

Sin control, podan árboles
para instalar carteles






Ramas cortadas y apiladas, en la esquina de Báez y Arguibel, junto al restaurante Novecento​



Los vecinos dicen que el gobierno ni la policía toman medidas



La zona de Las Cañitas, como otros muchos lugares de Palermo donde la actividad gastronómica e inmobiliaria crece en forma incesante, elegida por porteños y turistas precisamente por sus frondosas arboledas y apacibles calles cortadas, corren riesgo de perder su encanto debido a la poda ilegal para instalar carteles de publicidad de grandes dimensiones y profusa iluminación.

En la madrugada de ayer, por ejemplo, se podó sin permiso un árbol situado en la esquina de Báez y Arguibel. Allí funciona el restaurante Novecento, sobre cuya terraza se pretende instalar uno de esas estructuras de publicidad callejera.

Este es uno de los tantos casos de podas ilegales que se registraron en los últimos meses en la zona, que ya cuenta con varias de esos enormes carteles lumínicos que, por otra parte, lejos aparecen de querer contribuir con el ahorro de energía que reclama el gobierno nacional.

María Teresa Isasi, coordinadora de Arbolado Urbano de la Ciudad, dijo a LA NACION: "El problema de la poda ilegal es muy frecuente, no sólo en Palermo, sino también en Belgrano". Daniel Purgat, de 32 años, encargado de Novecento, se defendió: "Nosotros no lo podamos. Cuando abrimos el restaurante, a las 6, las ramas ya estaban apiladas en la vereda. Nosotros le alquilamos la terraza del restaurante a la empresa Sarmiento Publicidad. Quizá lo podaron ellos". Ayer LA NACION no logró comunicarse con esa firma.

Mauricio Berardi, vecino de Las Cañitas, relató: "Hoy a la mañana [por ayer] vi que habían podado el árbol. Llamé al Centro Unico de Denuncias de la Ciudad y ahí me dijeron que no me podían tomar la denuncia, que tenía que llamar a la policía. En la comisaría 31a. me dijeron que llamara a la ciudad... ¿Nadie se hace cargo de la tala ilegal de árboles?", se preguntó.

Isasi indicó que los vecinos deben hacer la denuncia en la comisaría, para que los uniformados puedan "atrapar a los infractores en acción. La policía tiene la obligación de tomar nota de las denuncias", insistió Isasi. Sin embargo, LA NACION llamó ayer a esa sede policial donde respondieron que no podían hacerlo, que la poda ilegal debe denunciarse en el gobierno de la ciudad.

Luis Ortelli, de 28 años, y Juan Cuello, de 38, se quejaron por la poda ilegal de árboles en el barrio. "Cada vez que se construye un edificio se los arranca de las veredas para construir las cocheras", dijo Cuello.

Finalmente, Isasi aseguró que un inspector de la Dirección General de Espacios Verdes realizó ayer la denuncia en la Comisaría 31a. y que presentó las fotos del árbol podado. Y explicó: "En general, las condenas se reducen a realizar tareas comunitarias".


Franco Ruiz


http://www.lanacion.com.ar/EdicionImpresa/informaciongeneral/nota.asp?nota_id=982117
 
#5 ·
buenas noticias: recien pase y estaban todos los carteles totalmente cubiertos con una lona blanca y una faja que dice "publicidad en infraccion"
 
#6 ·
^^
Invasión publicitaria en la ciudad
El gobierno porteño retira carteles ilegales

Realizó un operativo en Las Cañitas; otros procedimientos

Viernes 8 de febrero de 2008 | Publicado en la Edición impresa


El gobierno porteño retiró e inhabilitó ayer diez carteles publicitarios en infracción ubicados en la zona de Las Cañitas. Los anuncios publicitarios estaban ubicados sobre terrazas, práctica prohibida en esa zona, categorizada como "residencial 2" según el Código de Planeamiento Urbano.

La medida, informaron en el Ministerio de Ambiente y Espacio Público, forma parte de un plan más amplio para "recuperar física y visualmente el espacio público de la ciudad" y seguirá en ésta y en otras zonas de la ciudad en los próximos días.

La semana pasada, la Dirección de Ordenamiento del Espacio Público -que depende del citado ministerio- había intimado a los propietarios de las viviendas, a los anunciantes y a las empresas de publicidad a presentar la documentación con las debidas habilitaciones para instalar la cartelería.

Ayer, cumplido el plazo previsto en la intimación, comenzó el retiro o inhabilitación de los carteles, todos ubicados sobre la calle Báez, entre Clay y Ortega y Gasset.

"Como en algunas comercios y casas no nos permitieron ingresar tuvimos que apelar a otros recursos", explicó a LA NACION Santiago Salvá, director de Ordenamiento del Espacio Público del gobierno porteño. Así, en tres de los diez carteles, sólo se colocó una faja que indica: "Dispositivo de publicidad en infracción". En otros seis se llegó a retirar la lona publicitaria y a colocar la misma faja. En el restante, ubicado en la esquina de Arguibel y Báez, se desarmó completamente la estructura del cartel. Como ya había informado LA NACION, un árbol había sido podado ilegalmente con el evidente fin de aumentar la visibilidad de un cartel.

Recuperación de la ciudad

"Queremos recuperar física y visualmente el espacio público de nuestra ciudad, por lo que estas medidas seguirán. Sólo en la zona de Las Cañitas contabilizamos 55 carteles en infracción, pero algunos anunciantes ya los están retirando", agregó Salvá.

Desde que asumió Mauricio Macri se retiraron 106 carteles en infracción, casi dos por día.

Estos carteles estaban dispuestos en forma contraria a lo dispuesto por el Código de Planeamiento Urbano o al de Habilitaciones y Verificaciones.

La infracción más común, según dicen en el gobierno porteño, es la colocación de un cartel en zonas de urbanización Parque, donde la publicidad está prohibida.

La mayoría de los carteles clausurados por el gobierno porteño estaban ubicados en Palermo. El Hipódromo Argentino, ubicado en ese barrio, tenía 23 carteles en infracción que fueron retirados.

En el Club de Arquitectura, en la avenida Francisco Beiró al 2100, se inhabilitaron otros 24 carteles. Nueve pertenecían a la empresa de publicidad PC Vía Publica y los 15 restantes a la empresa Atacama Publicidad SA.

"En Puerto Madero y por pedido de una jueza contravencional se hicieron los primeros operativos. Luego encontramos que varios clubes en los que está prohibido publicitar había varios carteles. En el club Excursionistas, de la zona del Bajo Belgrano, por ejemplo, encontramos 14 carteles levantados en infracción", contó a LA NACION Salvá.

En el total de 106 carteles ilegales clausurados por el gobierno porteño, había de las empresas Atacama Publicidad S.A., PC Vía Pública, MECA S.A. y Girola.

Tendencia internacional

"En los últimos años hemos ido en contra de la tendencia en las grandes ciudades que reducen la contaminación visual que generan la gran cantidad de carteles", se quejó una fuente del Ministerio de Ambiente y Espacio Público.

Muchas de las urbes más importantes del mundo, como Barcelona o Madrid, han reducido la publicidad en la vía pública. En las calles de la megalópolis brasileña de San Pablo, por ejemplo, directamente ya no hay carteles.

Por Agustín F. Cronenbold
De la Redacción de LA NACION

Iluminación

* Además de la instalación prohibida de carteles, muchos vecinos sufren la presencia de carteles excesivamente luminosos. Esto en un momento en el que el gobierno nacional impulsa un plan de "uso racional" de la energía. "Un cartel luminoso mucha energía no va a ahorrar", evidenciaron en el INTI. En el gobierno porteño dicen que comprometerán a los anunciantes a que ahorren energía.

http://www.lanacion.com.ar/edicionimpresa/informaciongeneral/nota.asp?nota_id=985568
 
#7 ·
Bienvenido sea, la contaminación visual de la ciudad de Buenos Aires dista mucho de la de muchas localidades del interior, pero es sin dudas un paso importante para la "descontaminación". La verdad que no sabía que ya habían retirado tantos carteles.
 
#9 ·
OPERATIVO DEL GOBIERNO PORTEÑO


Las Cañitas:
empezaron a desmontar
carteles publicitarios prohibidos​


La Comuna asegura que no se pueden colocar allí, porque es zona residencial. Y que los permisos estuvieron mal otorgados por la gestión anterior.



Dispositivo publicitario en infracción" era la leyenda que resaltaba ayer en casi todos los enormes carteles montados sobre terrazas de casas y restaurantes del sector gastronómico de Las Cañitas, en Palermo. Es que, después de una nota de Clarín sobre la invasión de carteles en la zona, el Gobierno de la Ciudad desplegó un operativo para desmontar las estructuras que, aseguran, están prohibidas en esa zona, considerada como residencial por el Código de Planeamiento Urbano.

Días antes habían enviado 55 intimaciones a los propietarios y a las empresas de publicidad para que presentaran los permisos de instalación que, muchos vecinos, aseguran tener.

Con un camión con elevador y grúa, empleados de la Comuna removieron una estructura en la esquina de Baéz y Arguibel -donde hace dos semanas talaron un árbol para despejar la visión-; y quitaron los avisos publicitarios de otras ocho estructuras -ubicadas del 100 al 300 de la calle Báez-, que hasta ayer seguían de pie, pero con una faja de infracción que las cubría.

Santiago Salvá, director de Ordenamiento del Espacio Público dijo a Clarín que no se desmontaron todos los carteles porque están en propiedades privadas y, por lo tanto, necesitan una orden de allanamiento que, anticipó, gestionarán a través de la Procuraduría General: "Muchos propietarios no nos permitieron el acceso a sus inmuebles. Por eso, sólo sacamos los avisos de los carteles que están al ras de la línea de edificación", explicó el funcionario.

El operativo sorprendió a los vecinos y generó polémica entre los propietarios que alquilan sus terrazas a empresas de publicidad por montos que oscilan entre los $ 1.000 y los $ 3.000 mensuales. "Si en el Gobierno dicen que los carteles son perjudiciales, que los saquen de toda la Capital", desafió Luis Kazienko, un artista plástico que vive hace 30 años en Las Cañitas. Jorge Serrano también tiene un cartel colocado en la terraza de su casa de Baéz al 200. "Hace tres años que me instalaron el cartel y recién ahora, después de que hicieron la publicidad de la campaña electoral, se preocupan por sacarlo", criticó. Otra vecina contó que, paradójicamente, la cara de Macri sonreía antes de los comicios desde uno de esos carteles gigantes.

Aunque desde el Gobierno porteño dicen que los permisos para instalar estos carteles "espectaculares" -como los llaman en el ambiente publicitario- estuvieron mal otorgados por la gestión anterior, el vocero de una empresa de publicidad que pidió no ser identificado contó que para conseguir la habilitación oficial -al menos hasta el 10 de diciembre- debían presentar "el contrato de locación con el dueño del inmueble, una póliza de seguro y un plano de la estructura y de su ubicación con el aval de Colegio de Ingenieros".

En una recorrida que realizó Clarín por el sector gastronómico de Las Cañitas, detectó al menos 10 carteles sobre techos y terrazas. Según Salvá, los números son aún mayores. En las 10 manzanas comprendidas entre Ortega y Gasset, Luis María Campos, Clay y el Campo de Polo, los inspectores comunales detectaron 55 carteles, aunque no todos estarían en infracción. La contaminación visual, según contaron otros vecinos, se suma a la dificultad para circular por las mesas en las veredas, los problemas de estacionamiento por las noches y el ruido, focalizado sobre todo en la calle Báez.





Los carteles estaban emplazados sobre terrazas.




En Dorrego los siguen poniendo


Mientras personal de la Comuna removía ayer carteles prohibidos en Báez al 200, a solo metros y ajenos al operativo, empleados de una empresa de publicidad habían terminaban de montar otra estructura en los terraplenes del ferrocarril Mitre, en avenida Dorrego y Báez.

Sobre esos terrenos se levanta una verdadera cortina de avisos, que se extiende por más de 100 metros entre Huergo y Bullrich y que, al menos en esa zona, ya no deja ver el paso del tren.

Desde el Gobierno porteño explicaron que si bien no existe regulación en materia publicitaria para las tierras del ferrocarril, igualmente intimaron a TBA y a las empresas de publicidad a presentar la documentación habilitante.


http://www.clarin.com/diario/2008/02/08/laciudad/h-04001.htm
 
#13 ·


¿Ven ese delirante desparramo de carteles?

Bueno, según la zonificación vigente todo eso es "APH / Área de Protección Histórica":



(Foto de Porotius, la semana pasada.)
 
#16 ·

Contaminación visual
Gobierno porteño detectó carteles en infracción
También promueve la remoción de avisos, posters y folletos pegados en postes de luz y señales de tránsito. No avanzaron en la zona del Obelisco.


El Gobierno de la Ciudad detectó 92 carteles publicitarios en puntos neurálgicos que estaban en infracción en el marco del plan por erradicar la contaminación visual.

La mayoría de los carteles irregulares se hallaron en la avenida Francisco Beiró, del 2000 al 2100; y en cercanías del Hipódromo Argentino de Palermo; así como también en Calabria 1300 al 1700, en Puerto Madero y en avenida Figueroa Alcorta y Benjamin Basavilbaso.

También, el operativo se completó con acciones para la remoción de pequeños avisos, posters y folletos pegados sobre los postes de alumbrado público, señales de tránsito, entre otros, que fueron acompañadas por intimaciones a los responsables, según informó la agencia oficial de noticias Télam.

La zona afectada fue la comprendida por la avenida Cabildo, entre General Paz hasta la estación Carranza, y la avenida Rivadavia, desde Acoyte hasta el Congreso de la Nación.

Anteriormente se había realizado un trabajo similar en el mismo marco pero sobre la avenida Del Libertador, en esa ocasión se retiraron 100 carteles que estaban en infracción.

http://www.criticadigital.com/index.php?secc=nota&nid=1059
 
#17 ·
Recuperación del espacio público

Macri participó de un operativo contra carteles publicitarios en infracción


El jefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Mauricio Macri, afirmó que el espacio público "debe ser respetuoso, no violento y sin contaminación visual”, al participar en el barrio de Agronomía de un operativo de control de carteles publicitarios en infracción.

Subido en una grúa destinada a la realización del operativo, Macri pegó una faja con la leyenda “Publicidad en infracción”, sobre un cartel ubicado en la esquina de Francisco Beiró y Constituyentes.

El jefe de Gobierno reiteró que el espacio público es una de las prioridades en la gestión de gobierno y señaló que existe un compromiso con los vecinos de "cuidar que no haya contaminación visual".

Macri estuvo acompañado por el Ministro de Ambiente y Espacio Público, Juan Pablo Piccardo; el Subsecretario de Espacio Público, Carlos Tramutola y el Director de Ordenamiento de Espacio Público, Santiago Salva.

El lugar inspeccionado, por tratarse de un distrito denominado UP (Urbanización Parque), está vedado el emplazamiento de dispositivos publicitarios de cualquier tipo. Este operativo se suma a los realizados desde el inicio de la gestión en Las Cañitas, peatonal Florida, Avenida Lugones, Avenida del Libertador, Autopista 25 de Mayo, Dorrego, y el Parque 3 de Febrero, entre otros.

Las acciones se enmarcan dentro de la política integral del Gobierno porteño de uso responsable y recuperación del espacio público. En lo que va del año 2008, se retiraron unos 369 carteles en infracción, se colocaron 129 fajas de “Publicidad en infracción”, se retiraron 4 mil pegatinas y se dispusieron 90 intimaciones a los anunciantes.

Existe en la Ciudad de Buenos Aires una importante contaminación visual por publicidad en la vía publica y marquesinas de comercios que no sólo dañan la estética de la cuadra, sino que también tienen en algunos casos dimensiones y salientes que pueden llegar a ser peligrosas para los peatones.

Se calculan más de 30 mil carteles ilegales en Buenos Aires, lo cual va en contra de la tendencia internacional de minimizar la contaminación visual, tal cual están realizando Madrid, San Pablo y Bogotá, entre otras importantes metrópolis.
Link: http://www.buenosaires.gov.ar/noticias/?modulo=ver&idioma=es&item_id=11&contenido_id=22302
 
#18 ·
^^ La noticia es buenísima, lo vi en mi barrio, realmente es una mejora "automática". Ojalá que esto se extienda a toda la ciudad, hay zonas como la de la Av. Cabildo y Juramento en donde la contaminación visual realmente asusta.

Estas noticias, como la del proyecto de APH de la Av. Callao, en donde se explica claramente la eliminación de la contaminación visual, me dice que hay una luz al final del túnel.

Ahora, las fotos del operativo son bizarrísimas:





Este parece Agustín Pichot

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V

 
#19 ·

PROYECTO DEL EJECUTIVO PORTEÑO QUE TRATARÁ LA LEGISLATURA


Quieren poner fuertes
restricciones a la publicidad
en las calles de la Ciudad​



Un relevamiento oficial reconoce que el 70% de la publicidad está en infracción.

Por: Nora Sánchez


El Ejecutivo porteño presentará esta semana un proyecto en la Legislatura para restringir los tipos de carteles publicitarios que se pueden instalar en las calles, iniciativa que seguramente despertará polémica. La idea es combatir la contaminación visual, porque, según admite el Gobierno, hoy el 70% de los carteles, unos 30.000, están en infracción.

Un primer cambio será prohibir los carteles con sponsor. Por ejemplo, un quiosco o bar podrá poner en la fachada del local su nombre, pero en el cartel no podrá haber marcas de gaseosas o golosinas. Además, se limitará mucho la colocación de marquesinas.

Luego, el proyecto plantea dividir la Ciudad en cuatro zonas. La primera será la que va desde el Riachuelo hasta la General Paz, entre el Río de la Plata y las calles Salta, Rincón, Junín, Santa Fe, Cabildo y otras (ver mapa). Es la misma zona que el Gobierno porteño propuso que sea nombrada "Paisaje Cultural Urbano" por la UNESCO.

Allí habrá fuertes restricciones a la publicidad. Los principales cambios serán que prohibirán los grandes carteles en las terrazas de los edificios. Y sólo se permitirán carteles rectos colocados en la fachada y que sólo se podrán ver parándose de frente a los locales. Es decir que no podrá haber más carteles salientes, visibles desde los laterales. Tampoco podrán tener luces.

La segunda zona será la de los alrededores del Obelisco y varias cuadras de Corrientes y Lavalle. Allí se permitirán más tipos de carteles y se incentivará a que se instalen equipos de alta tecnología, como pantallas electrónicas. Según explicaron en el Gobierno, la idea es convertir esa zona en una especie de Times Square porteño, en referencia a la zona comercial y de espectáculos de Nueva York.

El resto de la Ciudad serán las zonas 3 y 4. Allí tampoco se permitirán los carteles salientes, aunque los frontales sí podrán tener luces de fondo, por ejemplo.

Otro planteo novedoso es que se autorizará en toda la Ciudad la colocación de publicidad en las mediasombras de los edificios en construcción o en los que se esté arreglando la fachada. El objetivo es que la publicidad les dé fondos a los consorcios y los constructores para concretar esas obras. Esta idea había sido alguna vez pensada por el Gobierno de Aníbal Ibarra, aunque nunca la concretó.

Por otra parte, se permitirá a los edificios corporativos poner un "rótulo" con el nombre de la empresa que lo ocupe (como en algunos complejos de oficinas de Catalinas, por ejemplo). Y los que sean de una sola firma, como los supermercados, podrán colocar en sus fachadas alguna publicidad.

La necesidad de reordenar la publicidad callejera tiene que ver con el desborde que se ve actualmente. El ministro de Espacio Público, Juan Pablo Piccardo, aseguró: "Hay un total descontrol del Estado. El 70% de los elementos publicitarios que vemos en la calle está en infracción. Además, el Código de Habilitaciones vigente data del año 80 y es muy confuso y permisivo, lo que facilitó que todas las compañías publicitarias avanzaran sobre el espacio público. El nuevo código que queremos lanzar hace foco en el cuidado de la estética urbana y del patrimonio cultural y arquitectónico".

Por lo pronto, en lo que va del año la Comuna levantó 369 carteles ilegales e intimó a a unos 90 anunciantes. Los operativos se hicieron mayormente en Las Cañitas, los bosques de Palermo, la peatonal Florida y las avenidas Lugones y Libertador, entre otros lugares. El Ejecutivo parece haber tomado el tema como prioritario: de hecho, el jefe de Gabinete, Horacio Rodríguez Larreta, viajó a San Pablo a ver cómo puso esa ciudad en marcha su reglamentación sobre la publicidad callejera.

La polución visual no sólo es molesta sino peligrosa. Un estudio de la Facultad de Ingeniería de la UBA demostró que en las zonas donde hay mucha cartelería el riesgo de que los automovilistas se distraigan y sufran accidentes se triplica. De hecho, hace dos años que la Comuna viene combatiendo los carteles sobre las avenidas Lugones y Cantilo, por ejemplo.

El proyecto macrista deberá ser tratado por la Comisión de Espacio Público de la Legislatura, donde por ahora no hubo críticas. En el kirchnerismo, por ejemplo, explicaron que como el texto aún no les había llegado no querían hacer comentarios. En la Coalición Cívica, en tanto, adelantaron que están de acuerdo con limitar la publicidad en las zonas de valor patrimonial y con permitir que se ponga publicidad en las mediasombras de las fachadas de edificios para financiar los arreglos.

En el Ejecutivo porteño adelantaron que, una vez votada la ley, concederán plazos para sacar los actuales carteles. "Tuvimos conversaciones con empresas de publicidad en vía pública. Nos pidieron una norma menos restrictiva, pero reconocieron que la situación actual no beneficia a nadie", aseguró el ministro Piccardo. El Gobierno apunta a ordenar la mitad del espacio público en dos años, y el total en cuatro.




Nuevas reglas para promocionar marcas


Futuras prohibiciones


En la zona 1 no podrá haber carteles en las terrazas de los edificios, que actualmente representa un ingreso para los consorcios. En la zona 2, en cambio, permitirán las pantallas eléctricas. Y los carteles con los nombres de los comercios no podrán tener sponsors, como marcas de gaseosas o golosinas.




En cifras


369 carteles ilegales fueron retirados en el año. También sacaron 4.000 pegatinas. 90 Intimaciones se labraron a anunciantes. Hubo operativos en Las Cañitas, peatonal Florida y Palermo, por ejemplo.




Las letras que no se pueden leer


Guillermo Allerand


Uno de los puntos más vulnerables de la belleza de Buenos Aires es la proliferación indiscriminada de publicidad. No es apenas contaminación visual, que no permite "leer" en la confusión de esa sopa de letras las señales viales que sí son indispensables. También es un agobio por la invasión en las veredas, pobladas de marquesinas que ocultan la arquitectura porteña. Las ciudades del primer mundo tienen la costumbre de regular el espacio comercial. Otras de América latina también. En cambio, un viaje por la avenida Córdoba o por Pueyrredón puede enloquecer a cualquiera que trate de distinguir algo en la Babel de carteles superpuestos. Si hasta los bares desaparecen bajo el sponsoreo de las gaseosas. Cambiar esta situación suena a imposible. ¿Una ciudad limpia?


http://www.clarin.com/diario/2008/05/06/laciudad/h-01665466.htm
 
#21 ·
Adhiero al 100%. Ojalá que pueda hacerse cumplir, sería un avance gigantesco.
Algo que se debe eliminar y no veo que figure en el proyecto, es la publicidad en los carteles indicadores de las calles, además de vergonzoso es bastante confuso, sobre todo para los turistas.
 
#22 ·
ME ENCANTO ESTO:

"La segunda zona será la de los alrededores del Obelisco y varias cuadras de Corrientes y Lavalle. Allí se permitirán más tipos de carteles y se incentivará a que se instalen equipos de alta tecnología, como pantallas electrónicas. Según explicaron en el Gobierno, la idea es convertir esa zona en una especie de Times Square porteño, en referencia a la zona comercial y de espectáculos de Nueva York..."

Me alegro el día.
 
#25 ·
Es ilegal el 70% de los carteles callejeros

En la Capital: el gobierno local presentó un proyecto en la Legislatura para eliminar la contaminación visual

Quieren restringir la publicidad aérea, las marquesinas y los sponsors en los frentes de comercios; prevén duras penas

El 70 por ciento de los carteles publicitarios de la Capital está en infracción. La falta de control por parte del Estado y la irresponsabilidad de muchos empresarios colaboraron a lo largo de los años para que la ciudad padeciera hoy una enorme contaminación visual en su espacio público.

Ante este diagnóstico, el gobierno porteño envió a la Legislatura un proyecto de Código de Publicidad, que divide el distrito en cuatro zonas con distintos criterios para permitir la práctica publicitaria. Entre otros conceptos, prohíbe las marquesinas en toda la ciudad y la publicidad de sponsors en toldos de quioscos, al tiempo que reduce considerablemente el tamaño de los denominados "carteles salientes" que suelen usar los comercios para ser vistos desde lejos.

El modelo que sigue el gobierno porteño es el que se aplicó en San Pablo, Brasil, que obligó a todos los locales comerciales a utilizar sólo carteles frontales, mientras que los salientes se permiten con restricciones.

La ciudad establece que los infractores de esta nueva normativa, que deberá ser debatida por la Legislatura, deberán pagar multas de entre 1000 y 900.000 pesos, según la gravedad de la falta.

A pesar de que los diputados aún no comenzaron a discutir el proyecto del Poder Ejecutivo, dos de las tres cámaras que agrupan la actividad de publicidad y cartelería en la vía pública en la Capital se quejan no sólo porque lo consideran "demasiado restrictivo", sino porque aseguran que no fueron consultados a la hora de elaborar la iniciativa que se busca sancionar.

El proyecto establece tres áreas especiales, conformadas por varias cuadras de la avenida Corrientes, de Lavalle y de la zona más próxima al Obelisco, en las que se permitirá la colocación de carteles y se promoverá la incorporación de nuevas tecnologías. Por el contrario, en la zona del Bajo, desde Barracas hasta Núñez, las restricciones serán mayores. Habrá otras dos zonas, que no incluyen ninguna de las anteriores, en las que se eliminará la posibilidad de usar las terrazas como instrumentos publicitarios.

"Se debería adoptar una política más moderada y realizar un ordenamiento que nosotros mismos planteamos. Creemos que hace falta un debate profundo en la Legislatura", dijo a LA NACION Gustavo Brizuela, presidente de la Asociación Argentina de Empresas de Publicidad Exterior, que agrupa a 33 compañías del rubro.

En la Cámara Argentina de la Industria del Letrero y Afines, que tiene 335 socios, estiman que pueden sufrir graves perjuicios: "Prohíben las marquesinas, los carteles salientes y la iluminación. Nuestro negocio es la fabricación de carteles y su mantenimiento. Aniquilan nuestra actividad", dijo Daniel Carnaghi, titular de la entidad.

Reconversión

El ministro de Ambiente y Espacio Público, Juan Pablo Piccardo, uno de los inspiradores del proyecto relativizó ese diagnóstico: "La situación actual perjudica a tres millones de personas que viven en la ciudad. Las empresas fueron total o parcialmente responsables de lo que hoy ocurre en el espacio visual porteño. Por eso, tendrán que reconvertirse a las nuevas posibilidades que se les brinda".

Piccardo se refiere a la posibilidad que podrían tener esas firmas de colocar publicidad en las medias sombras de los edificios en construcción o en aquellos cuyas fachadas estén en arreglo. El objetivo, explicó el funcionario, es que la publicidad les dé fondos a los consorcios y a los constructores para concretar esas obras.

Carnaghi le respondió: "Nos obligará a reconvertirnos en fabricantes de rejas y de elementos de aluminio. No se entiende: tenemos que sacar la publicidad del toldo de los quioscos y buscar un nuevo soporte como el mobiliario urbano. Las empresas no están obligadas a cumplir con ninguna de estas nuevas restricciones".

La licitación del mobiliario urbano, compuesto por los refugios de colectivos, pantallas y paradas, entre otros elementos, es una de las deudas que tiene el gobierno porteño. Los contratos vencieron hace más de una década y los intentos por volver a licitar el servicio fueron frenados con amparos judiciales. Actualmente, se trabaja en el nuevo pliego según pudo saber LA NACION se evalúa prohibir la publicidad en los carteles indicadores de calles. El gobierno aumentó los cánones a principios de este año a todas las empresas prestatarias.

Según se explicó oficialmente, la idea del nuevo código surgió después de analizar experiencias en ciudades extranjeras. "San Pablo, en Brasil, es un ejemplo espectacular del impacto de una política seria contra la contaminación visual. [Ver aparte.] Esperamos que la Legislatura acompañe este proyecto tan importante para la ciudad", dijo el jefe de gabinete, Horacio Rodríguez Larreta.

El gobierno espera poder ordenar el 50% del espacio público en dos años y el resto, en el siguiente bienio.

En la Legislatura, hay cautela. Los bloques kirchnerista y de la Coalición Cívica esperan ver el proyecto para poder opinar.

Por Laura Rocha
De la Redacción de LA NACION

El proyecto

En la zona 1 delimitada por el Riachuelo, Hernandarias, Gualeguay, la avenida Martín García, Montes de Oca, Finochietto, A. Olmos, Carrillo, Salta, Independencia, Rincón, Junín, avenida Santa Fe, Salguero, Güemes, Godoy Cruz, Av. Santa Fe, Av. Cabildo, Virrey del Pino, Amenábar, Monroe, Avenida del Libertador, Av. General Paz, y el Río de la Plata, sólo se permitirán carteles frontales.

La zona 2 comprende tres áreas especiales: la Plaza de la República, un tramo de la avenida Corrientes, y Lavalle, en donde es peatonal. Allí se permitirán carteles eléctricos.

Las zonas 3 y 4 serán las áreas comerciales y residenciales no incluidas en las zonas 1 y 2. Los carteles salientes sólo podrán tener una medida de 40 por 60.

En lo que va del año se retiraron unos 369 carteles en infracción, se colocaron 129 fajas de "dispositivo publicitario en infracción", se retiraron 4000 pegatinas y se intimó a 90 anunciantes.


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