A partir del año 2004, Brasil inició un largo y arduo proyecto para convertirse en uno de los 10 ganadores de la medalla de oro del mundo en los juegos olímpicos.
Requirió grandes inversiones en el desarrollo de infraestructura y especialmente fuera de las grandes ciudades para atraer a jóvenes y aficionados al deporte olímpico. Además, requiere traer entrenadores extranjeros, que son especialistas en su propio campo de especialización, y la creación de muchos campeonatos nacionales,estaduales, y hasta entre escuelas. Y sobre todo incentivos para que las escuelas de todos los niveles participen en estos eventos.
El Comité Olímpico Brasileño también tuvo otro objetivo, uno modesto, eso sería convertirse en el segundo ganador de medallas dentro del continente americano detrás de Estados Unidos.
Río 2016 fue un gran impulso para el proyecto olímpico brasileño, y aunque el país no terminó en los primeros 10, en realidad terminó en la posición 13.
Terminó por delante de Canadá y Cuba en medallas de oro, en segundo lugar solo detras de los Estados Unidos, entre los paises de las Américas.