Urbanismo se trasladará a Legazpi (matadero)
Urbanismo se trasladará a Legazpi y toda la manzana que ahora ocupa será para pisos
SARA MEDIALDEA /
ABC
MADRID. El edificio de la concejalía de Urbanismo, que ocupa una manzana completa en una de las mejores zonas de Madrid, se trasladará a la antigua nave de frutas y verduras de Legazpi. En esta zona ocupará los espacios que ahora se están liberando, y contará además con un edificio de oficinas anexo en el que se concentrará toda la edificabilidad que corresponde al Ayuntamiento en la zona.
Este proyecto está incluido en los planes de la concejalía de Hacienda, responsable del cambio de sedes y principal beneficiaria de este traslado: además de modernizar las instalaciones y dotarlas de las últimas tecnologías, la mudanza dejará libre una manzana completa en una de las mejores zonas de la ciudad. Una manzana calificada como suelo residencial y con la que el Gobierno municipal pretende incrementar sus arcas, vendiendo el suelo para construir vivienda.
Según los cálculos de Hacienda, área que dirige el concejal Juan Bravo, la enorme parcela podría suponer, a precio de mercado, alrededor de 250 millones de euros. De hecho, ya se valoraba en la mitad de esta cifra en el año 2002, cuando los responsables locales se plantearon su traslado y utilizar su suelo para financiar otras operaciones. La cifra estuvo a punto de incluirse en los presupuestos municipales entonces.
Plan especial
Urbanismo ocupa toda una manzana entre la avenida de Alfonso XIII y las calles Paraguay, Guatemala y Puerto Rico. El traslado no se realizará en este mandato, sino en el siguiente. Primero deberá terminar de elaborarse el plan especial que regula urbanísticamente todo el ámbito del antiguo Matadero y la que fue nave de frutas y verduras. Un plan que ahora están realizando los responsables de Urbanismo, con Pilar Martínez a la cabeza.
La concejalía ocuparía, previamente reformados, los espacios que ahora están quedando vacíos en este lugar: las instalaciones del SAMUR, que se han ido al palacete de la Casa de Campo donde estaba la Policía Municipal antes de mudarse a su nueva sede en Julián Camarillo. Y también las de los sindicatos municipales, reubicados en diversos emplazamientos.
Por último, también quedan libres el Almacén de Villa y la Oficina de objetos perdidos, que ahora están iniciando su proceso de traslado.
Además de la concejalía, en la nave de frutas y verduras también se construirá un nuevo inmueble, que concentrará toda la edificabilidad permitida en la zona. Será, probablemente, dedicado a oficinas, y de su alquiler o venta, y la enajenación de los terrenos de la actual concejalía de Urbanismo, conseguirá el Gobierno municipal liquidez para financiar, al menos en parte, la operación de transformación del Matadero.
No precisa recalificación
Recuerdan en el Ayuntamiento que la manzana donde se encuentra ahora Urbanismo no precisa siquiera de recalificación para ser vendida como suelo para viviendas, ya que su uso es residencial. Este inmueble, que en parte fue ocupado durante un tiempo como depósito de la grúa municipal, sufrió un derrumbamiento parcial en junio del año 2001: uno de sus patios interiores se vino abajo.
Afortunadamente sólo hubo que registrar daños materiales, dado que sucedió durante un fin de semana, cuando no estaban en el edificio ninguno de los 1.500 trabajadores que acuden a diario al lugar. Desde entonces, los responsables municipales se planteaban el traslado de las instalaciones.
Claro que la idea no era enteramente nueva: también lo había intentado antes otro concejal de Urbanismo, Enrique Villoria, quien quiso permutarlo por un solar en la M-30. Un proyecto que finalmente no cuajó.
En tiempos del concejal Ignacio del Río -en el año 2002-, se planteó una operación inmobiliaria que incluía estos terrenos dentro de una cadena de permutas y compras, a cambio de los inmuebles del BBVA en Alcalá, 45 y Paseo de Recoletos, 12, y el del BSCH en Alcalá, 49.
Los edificios se compraron y pagaron con dinero y otras parcelas -180 millones de euros de operación-, pero Urbanismo no se tocó entonces.
Incorporar tecnologías
Urbanismo quiere aprovechar el traslado no sólo para mejorar las instalaciones y hacerlas más funcionales, sino también para aplicar un plan de modernización que adapte los procedimientos y sistemas de trabajo para que los trámites en esta concejalía -una de las más visitadas por los madrileños- sean más ágiles.
En cuanto al edificio que acogerá esta concejalía, el mercado de frutas y verduras, fue proyectado por los arquitectos Francisco Javier Ferrero y Luis Bellido González, en colaboración con el ingeniero José Antonio Peña Boeuf, en el año 1926. Terminó de construirse en 1935. Tras dejar de ser utilizado como nave de frutas, pasó a ser ocupado por distintas dependencias locales.