Pues he vivido casi 20 años en el interior rural de Galicia, O Saviñao/Terra de Lemos, y no puedo sino descojonarme de pancartas como aquélla de leyes urbanitas. El choricero por décadas con subvenciones en la ganadería, por ejemplo, pues ya tal. Lo de los cazadores está muy bien, os invito a convivir con las mandas de escopeteros por el Caurel, hacen toda la bisbarra su coto particular. Cualquier conflicto con ellos acabará a hostias o algo peor, lo mejor al verlos es salir huyendo. Yo me cansé por años de intentar revertir el declive, en AGE y luego En Marea, Acabé quemado de los políticos pero también de ese entorno rural, en especial de los ganaderos, que me tomaron el pelo, lo siento por la gente decente del SLG, pero me queimaron los paisaniños. Mucho más feliz en Santiago de Compostela.
A día de hoy me importa un pepino de dónde me viene ya leche o el queso, mientras tenga buena calidad y precio, pois tanto che me ten... Ay, aquellas jornadas con representantes de las asociaciones de ganaderos y sector lácteo de Dinamarca, Países Bajos, hasta Canadá y eurodiputados, lo organizamos en Ames. Al final no vinieron los representantes de los ganaderos gallegos salvo un par del SLG, días atrás estaban de tractorada borroka colapsando acceso a ciudades, pero Feijóo les dio unos centimiños y volvieron a sus casas. Al final eran más traductores para los extranjeros y eurodiputados que asistentes. Los europeos non entendían eso de no darle valor añadido a la leche haciendo derivados lácteos o uniéndose en cooperativas. Si les cóntase lo del labrego con el Mercedes o Audi y el tractor subvencionado oxidado con las fincas abandonadas a monte... Corría entonces el año 2015.