MÁLAGA
La nueva ordenanza sobre ruido plantea prohibir el botellón en Málaga
El borrador que estudia el equipo de gobierno prevé multas y la intervención de las bebidas a quienes lleven a cabo esta práctica a partir de las 22.00 horas La Policía Local sancionará a las personas que causen escándalo en la vía pública
J. CANO/ I. LILLO/MÁLAGA
COPAS. Sólo se podrá consumir bebidas por la noche en locales y terrazas. / SUR. ARCHIVO
LA ORDENANZA
Botellón
Dónde se prohíbe: En calles, plazas y espacios públicos con viviendas próximas. Cuándo: No se podrá beber en la vía pública desde las 22.00 hasta las 8.00 horas del día siguiente.
Cómo: La Policía Local avisará primero a quienes ejerzan esta actividad. Pasados 10 minutos, si no cesan voluntariamente, se requisará la bebida y se identificará y denunciará a los responsables.
Bares
Qué: Prevé intensificar las inspecciones de establecimientos e impone el uso de limitadores acústicos. También endurece las sanciones.
Hogar
Actividades: Queda prohibido realizar trabajos de bricolaje, cantar, gritar, organizar fiestas, utilizar electrodomésticos ruidosos y no adoptar medidas para impedir que los animales domésticas molesten al vecindario.
Cuándo: De forma general en horas de descanso nocturno. En el caso del bricolaje, desde las 20.00 a las 8.00 horas entre semana y hasta las 9.30 horas los sábados, domingos y festivos.
Vehículos
Qué: Motos con escape libre o coches equipados con aparatos de música cuyo sonido trascienda del vehículo, entre otros.
Consecuencias: Los agentes podrán inmovilizar los vehículos sin necesidad de realizar mediciones, cuando superen el nivel de emisión acústica tolerado.
Una apuesta por el descanso
Medianoche de muchos jueves, la mayoría de los viernes y todos los sábados del año. Los vecinos de enclaves como la plaza de la Merced, el teatro Cervantes y la plaza de San Francisco, en el Centro, pero también los de la urbanización El Mayorazgo y otros tantos barrios de la ciudad se debaten entre permanecer despiertos hasta las tres -a veces las cuatro- de la madrugada, cuando la movida se recoge o se desplaza a los bares, o desafiar al ruido e intentar dormir.
Beber en la vía pública, fuera de terrazas de bares o establecimientos, podría tener los días contados. El borrador de la ordenanza sobre ruidos elaborado por el Área de Medio Ambiente contempla la prohibición expresa de realizar «botellones o reuniones de personas para beber en cualquier vía, plaza o espacio público con viviendas próximas desde las diez de la noche hasta las ocho de la mañana», según el documento, al que ha tenido acceso SUR.
Tras un primer aviso para que cesen voluntariamente la actividad, la Policía Local intervendrá las bebidas e identificará y denunciará a los responsables. El texto pone de relieve que esta medida tiene como objetivo garantizar el derecho al descanso de los ciudadanos. No en vano, ha sido realizado en colaboración con los vecinos afectados por la movida.
Coches-discoteca
El borrador también da potestad a los agentes para que sancionen actividades tales como gritar o utilizar aparatos de radio y equipos musicales dentro de vehículos cuando el sonido trascienda de los mismos. La policía municipal podrá determinar la paralización de la actividad, la inmovilización del vehículo o precinto del aparato causante de ruido.
La ordenanza endurecerá las normas correctoras en locales de ocio con un alto nivel de ruido, como los bares y discotecas, y la vigilancia de las mismas. En este sentido, el texto impone la instalación de limitadores que permitan asegurar que las emisiones del equipo musical no superen los límites acústicos exigidos.
Entre los puntos más destacados del documento se encuentra el hecho de que los agentes, sin necesidad de utilizar aparatos medidores, puedan inmovilizar y trasladar al depósito los vehículos que circulen a escape libre y aquellos «notoria u ostensiblemente ruidosos por cualquier causa a juicio del funcionario interviniente», cita textualmente.
Pero el borrador de la ordenanza no se queda tan sólo en los efectos de la movida. Entra incluso en los hogares, hasta el punto de que prohíbe realizar trabajos de bricolaje y reparaciones domésticas entre las 20.00 y las 8.00 horas los días laborables, y hasta las 9.30 horas en fines de semana y festivos. Tampoco se podrá «cantar, gritar o vociferar», organizar fiestas ni utilizar electrodomésticos que generen ruido en horas de descanso nocturno.
Los poseedores de animales domésticos están obligados a adoptar medidas necesarias para impedir que los ladridos, por ejemplo, molesten a sus vecinos. Y es que el documento desciende hasta el detalle de fijar un volumen máximo de la televisión o las horas de ensayo de quienes practiquen algún instrumento musical. Para ellos, la calle no será sinónimo de libertad absoluta. El borrador no permite actuaciones de grupos, vocalistas o músicos. Y eso incluye a los timbales.
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Bueno comprendo que los vecinos tenga derecho a descansar, pero es que los botellones son tan baratos..., queremos un botellódromo!!!!! :cheers: :cheers: :cheers: