El tranvía del Alto Deba podría funcionar en 2009 en su primer tramo entre Aretxabaleta y Bergara
La cuenta atrás ha comenzado. El tranvía del Alto Deba, que unirá los municipios de Bergara, Arrasate y Aretxabaleta a lo largo de 17,5 kilómetros y 19 paradas en un tiempo de apenas 30 minutos, va tomando forma con miras de comenzar las obras el próximo año para que esté ya en funcionamiento en 2009.
Así lo señalaron ayer algunos de los alcaldes de la comarca en la inauguración en Arrasate de una exposición (en la Casa de Cultura) que recoge el proyecto oficial y que contó con la presencia del consejero de Transportes y Obras Públicas, Álvaro Amann; del diputado general de Gipuzkoa, Joxe Joan Gonzalez de Txabarri, y del diputado para la Promoción y la Ordenación del Territorio, Koldo Azkoitia, además de numerosos alcaldes del Alto y Bajo Deba.
El consejero Amann señaló que la primera fase, cuyo coste superará los 110 millones de euros, tendrá una longitud de 17,5 kilómetros por la que circularán diez tranvías con capacidad para 120 personas (50 sentadas y 70 de pie) con una frecuencia de unos diez minutos, lo que permitirá realizar 4,2 millones de viajes anuales. El proyecto contempla realizar a continuación un segundo tramo que una Aretxabaleta con Ezkoria-tza y después una tercera fase, y por ahora última, que enlazará el cruce de San Prudentzio con Oñati.
En palabras de Amann, se trata de un sistema de transporte «moderno, seguro, efectivo, de calidad, confortable» y que «hoy por hoy es el más sostenible» que existe. Destacó, además, que las grandes ciudades europeas están apostando por su desarrollo frente al metro porque ofrece «prácticamente las mismas prestaciones y cuesta cinco veces menos, por lo que resulta clarísima la elección». Es por ello por lo que consideró que es hora de recuperar en la comarca un sistema de transporte «útil y sostenible» y que «ha evolucionado tecnológicamente» en los últimos años.
En el caso de Alto Deba, su futuro tranvía discurrirá a cielo descubierto salvo en 1.235 metros en los que irá bajo túneles o falsos túneles, aunque también lo hará a través de 629 metros de viaductos. Sus 19 paradas estarán repartidas de la siguiente forma: seis en Bergara, nueve en Arrasate y tres en Aretxabaleta.
A 80 kilómetros por hora
El trayecto se realizará por vía estrecha (de un metro) a una velocidad de 80 kilómetros por hora en zonas interurbanas, de 50 kilómetros por hora en zonas urbanas y de sólo 30 en las calles peatonales. De esta manera, el nuevo sistema de transporte podrá «convivir de forma amable» con vehículos y peatones, aunque Amann no ocultó que en ocasiones, como ha sucedido recientemente en Bilbao, se produzcan algunos atropellos, como sucede «con cualquier otro medio de transporte rodado».
Aún así, el consejero adelantó que de aquí a que se implante el nuevo sistema de transporte se producirán numerosos debates sobre la conveniencia o no de ejecutar el proyecto y sobre los puntos por los que debe discurrir en cada municipio. «Ya ocurrió en Bilbao y Gasteiz, y sucederá en Donostia, igual que aquí», apuntó para subrayar que en el caso de la capital vizcaina, por ejemplo, aquellos que se mostraban más preocupados por sus efectos (caso de los comerciantes del Centro), son ahora sus mayores «defensores».
Amann también puso de relieve el caso de la ciudad francesa de Burdeos donde están aprovechando la ampliación de la línea del tranvía para peatonalizar las calles por donde pasa. «Calle por la que pasa el tranvía, calle que se queda sin tráfico rodado», subrayó.
Respecto al temor vecinal existente de que el paso del tranvía afecte negativamente a la circulación de turismos al eliminar un carril de circulación y de que «no vaya a haber sitio para aparcar», consideró que se trata de dos afecciones «lógicas» dado que «queremos conseguir que el tranvía sea la alternativa al coche».
Proyecto supramunicipal
Por su parte, el diputado general, Joxe Joan Gonzalez de Txabarri, calificó de «proyecto estratégico» la ejecución del futuro tranvía del Alto Deba cuya comarca, apuntó, es la que cuenta con una «mayor inversión por habitante» de manos del presupuesto foral de Gipuzkoa.
Txabarri destacó especialmente la «vocación» de «conectar» con el Bajo Deba con la que nace el tranvía de Deba Garaia, por lo que mostró su disposición a «colaborar» en la financiación del proyecto, junto al Gobierno vasco y los ayuntamientos implicados, al tratarse de una solución de carácter «supramunicipal» que se enmarca perfectamente dentro del proyecto Gipuzkoa como ciudad 2020.
El diputado general se mostró también dispuesto a trasladar la solución del tranvía a otros puntos de Gipuzkoa como pudieran ser la capital guipuzcoana y la propia comarca de Donostialdea, como ya se está estudiando.
Fuente: Deia.
La cuenta atrás ha comenzado. El tranvía del Alto Deba, que unirá los municipios de Bergara, Arrasate y Aretxabaleta a lo largo de 17,5 kilómetros y 19 paradas en un tiempo de apenas 30 minutos, va tomando forma con miras de comenzar las obras el próximo año para que esté ya en funcionamiento en 2009.
Así lo señalaron ayer algunos de los alcaldes de la comarca en la inauguración en Arrasate de una exposición (en la Casa de Cultura) que recoge el proyecto oficial y que contó con la presencia del consejero de Transportes y Obras Públicas, Álvaro Amann; del diputado general de Gipuzkoa, Joxe Joan Gonzalez de Txabarri, y del diputado para la Promoción y la Ordenación del Territorio, Koldo Azkoitia, además de numerosos alcaldes del Alto y Bajo Deba.
El consejero Amann señaló que la primera fase, cuyo coste superará los 110 millones de euros, tendrá una longitud de 17,5 kilómetros por la que circularán diez tranvías con capacidad para 120 personas (50 sentadas y 70 de pie) con una frecuencia de unos diez minutos, lo que permitirá realizar 4,2 millones de viajes anuales. El proyecto contempla realizar a continuación un segundo tramo que una Aretxabaleta con Ezkoria-tza y después una tercera fase, y por ahora última, que enlazará el cruce de San Prudentzio con Oñati.
En palabras de Amann, se trata de un sistema de transporte «moderno, seguro, efectivo, de calidad, confortable» y que «hoy por hoy es el más sostenible» que existe. Destacó, además, que las grandes ciudades europeas están apostando por su desarrollo frente al metro porque ofrece «prácticamente las mismas prestaciones y cuesta cinco veces menos, por lo que resulta clarísima la elección». Es por ello por lo que consideró que es hora de recuperar en la comarca un sistema de transporte «útil y sostenible» y que «ha evolucionado tecnológicamente» en los últimos años.
En el caso de Alto Deba, su futuro tranvía discurrirá a cielo descubierto salvo en 1.235 metros en los que irá bajo túneles o falsos túneles, aunque también lo hará a través de 629 metros de viaductos. Sus 19 paradas estarán repartidas de la siguiente forma: seis en Bergara, nueve en Arrasate y tres en Aretxabaleta.
A 80 kilómetros por hora
El trayecto se realizará por vía estrecha (de un metro) a una velocidad de 80 kilómetros por hora en zonas interurbanas, de 50 kilómetros por hora en zonas urbanas y de sólo 30 en las calles peatonales. De esta manera, el nuevo sistema de transporte podrá «convivir de forma amable» con vehículos y peatones, aunque Amann no ocultó que en ocasiones, como ha sucedido recientemente en Bilbao, se produzcan algunos atropellos, como sucede «con cualquier otro medio de transporte rodado».
Aún así, el consejero adelantó que de aquí a que se implante el nuevo sistema de transporte se producirán numerosos debates sobre la conveniencia o no de ejecutar el proyecto y sobre los puntos por los que debe discurrir en cada municipio. «Ya ocurrió en Bilbao y Gasteiz, y sucederá en Donostia, igual que aquí», apuntó para subrayar que en el caso de la capital vizcaina, por ejemplo, aquellos que se mostraban más preocupados por sus efectos (caso de los comerciantes del Centro), son ahora sus mayores «defensores».
Amann también puso de relieve el caso de la ciudad francesa de Burdeos donde están aprovechando la ampliación de la línea del tranvía para peatonalizar las calles por donde pasa. «Calle por la que pasa el tranvía, calle que se queda sin tráfico rodado», subrayó.
Respecto al temor vecinal existente de que el paso del tranvía afecte negativamente a la circulación de turismos al eliminar un carril de circulación y de que «no vaya a haber sitio para aparcar», consideró que se trata de dos afecciones «lógicas» dado que «queremos conseguir que el tranvía sea la alternativa al coche».
Proyecto supramunicipal
Por su parte, el diputado general, Joxe Joan Gonzalez de Txabarri, calificó de «proyecto estratégico» la ejecución del futuro tranvía del Alto Deba cuya comarca, apuntó, es la que cuenta con una «mayor inversión por habitante» de manos del presupuesto foral de Gipuzkoa.
Txabarri destacó especialmente la «vocación» de «conectar» con el Bajo Deba con la que nace el tranvía de Deba Garaia, por lo que mostró su disposición a «colaborar» en la financiación del proyecto, junto al Gobierno vasco y los ayuntamientos implicados, al tratarse de una solución de carácter «supramunicipal» que se enmarca perfectamente dentro del proyecto Gipuzkoa como ciudad 2020.
El diputado general se mostró también dispuesto a trasladar la solución del tranvía a otros puntos de Gipuzkoa como pudieran ser la capital guipuzcoana y la propia comarca de Donostialdea, como ya se está estudiando.
Fuente: Deia.